28.10.08

sociedad binaria

Un día como hoy, pero del año pasado, la compañera Cristina Fernández de Kirchner ganaba en elecciones limpias y democráticas la Presidencia de la Nación de la República Argentina. Unos días después, en la asunción dio el discurso inaugural en el Congreso en el que dijo eso de que “ella no iba a ser la garante de la rentabilidad de los empresarios”.

No quiero hacer un repaso exhaustivo.

A los tres meses ya la presidenta estaba en jaque por las retenciones móviles que provocaron la salida intempestuosa de Martín Lousteau del Palacio de Hacienda (?), degollado en primerísimo primer palco por Guillermo Polémico Moreno. Desde ahí se sucedieron un sinfín de acontecimientos desestabilizadores desde los medios masivos, las mesas de enlaces patronales, los capitales financieros, las clases medias gorilas y las clase alta libertadora.

Es decir, no le fue fácil a la Presidenta gobernar de acuerdo a sus principios, porque para los dueños de la verdad, de la Argentina, del sentido común y de las buenas costumbres, el 46 por ciento de los ciudadanos (más del doble que su seguidora, Carrió) no es suficiente como para emanciparse con un mínimo de representación.

Este gobierno tiene en contra el 90 por ciento de los medios gráficos, audiovisuales y radiofónicos. Las clases medias citadinas. Las cúpulas eclesiásticas. Las Fuerzas Armadas. La oposición de izquierda, de derecha, de centro. Los nuevos ricos menemistas. El peronismo de derecha. Las fuerzas patronales del campo. El capital financiero. Los cínicos de siempre.

El gorilaje 2.0.

Aunque sean los dueños del poder real de la Argentina, sin embargo, no llegan a ser más que el 46 por ciento que entrona jefe de Estado en primera vuelta.

Si el gobierno tiene en contra a toda esa gente resumo que los está jodiendo.

Y si esa gente está enojada, yo soy feliz.

11 comentarios:

Goliardo dijo...

yo tambien, aunque soy feliz con bronca.

polycarpo dijo...

me anoto a la lista de argentinos felices =)
si, feliz, no triste, no se como explicarlo...

saludos!

Mario Paulela dijo...

Yo tengo una extraña clase de felicidad. De dientes apretados. A Cris la banco a muerte. Vos sabés.
Saludos
MP

La niña santa dijo...

Nata lamento arruinarte el motivo que impulsó la publicación de este post, pero Cristina asumir lo que se dice "asumir", asumió el 10 de diciembre de 2007. Un día como hoy salió electa presidenta, que también vale para tu posteo.

Y me sumo a MP con su felicidad de dientes apretados, simplemente porque falta mucho muchísimo por hacer y cada vez más palos en las ruedas.

caca dijo...

ahí cambié, gracias, lo que pasa es que el cambio recién empieza.

Anónimo dijo...

Comparto 100% un post increible que se agradece y pido permiso para reenviarlo a todo mundo
Nico de Morón.
PD: No aprieten tanto el diente compañeros, que en el conurbano seguimos bancando

Anónimo dijo...

Una amiga me decía: "Néstor fue el precio que el poder pagó para salir de la crisis". Es verdad. Bueno, la crisis terminó. Ahora volvemos a la "normalidad". Y... la vida es lucha, compañeros.
Lito.

matilda dijo...

y cumple. cómo cumple!
es inagotable. inclaudicable.

V

matilda dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Yo también la banco, aprendí a bancarla.
La banco, soy feliz, soy del Conurbano, vivo en la Capi, y me gusta que sea así: difícil, peliaguda y ella un cacho soberbia.

Hice una microencuesta (o torbellino de ideas, como se les dice ahora) con mis compañeras de oficina, a razón de este post. Dije: Cristina Fernandez de Kirchner, diganme lo primero que se les ocurra.
Todas mujeres, por dios! Me respondieron: soberbia, falsa, víbora, inteligente y adicta al botox, en ese orden.

Frente (para la Victoria) a este panorama, más Cristina Montonera para todos, para siempre, para el mundo.

Soy Mariano, hermano de Eif.

Mer Antoinette dijo...

Me llamó mucho la atención lo que dijo Mariano sobre lo que las compañerAs de trabajo piensan de la presidentA. De una mujer en el poder. Es terrible el sentido común. Lograr que las muejres mismas vean a una mujer en el poder como sinónimo de todo eso... me entristece mucho. Porque Evita les inspira lo mismo. Y desde ya, sabemos que no es sólo porque esté en el poder, sino, para lo que lo usa.