- Padre, he pecado…
- Cuéntame hijo.
- Uno, dos, tres, cuatro…
- No, hijo, que me digas tus pecados.
- Bueno, arrojé un volante en la vía pública.
- …
- …
- Eso no es considerado un pecado hijo.
- Es que era uno de un 504 y lo tiré del décimo piso.
- ¿Me estáis cargando, hijo…?
- No, padre, y con tanta mala leche que le di a una vieja en la cabeza, creo que la maté.
- …
- En realidad, quizás no haya muerto, no es lo más seguro.
- ¿Algo más hijo...?
- Gulé.
- …
- Gulé, Padre.
- ¿Qué?
- Que gulé.
- No entiendo…
- Comí mucho, eso es un pecado.
- Ah, cometiste el pecado capital de la gula.
- No, no cometí, comí mucho… y fue en
- Sigue hijo…
- Maldije.
- ¿Blasfemaste?
- No. Maldije.
- ¿Qué cosa maldijiste?
- A
- Pero eso no es un pecado.
- Para usted no será, para mí fue muy grave esa maldicho, se lo puedo jurar.
- ¿Haz tenido catecismo, hijo?
- No, he tenido al Jhonny y a
- Veo…
- …
- ¿Son sanitos?
- Sí, gracias a Dios, Padre.
- Sí, demoslé gracias… algo más.
- Sí, una duda…
- ¡Shot!
- ¿Qué?
- No, nada, pregúnteme.
- Yo desee una mujer que creía soltera y finalmente me di cuenta que tenía un marido, en ese caso, ¿he faltado al mandamiento si no sabía que era del prójimo
- Mmm… técnicamente no.
- Entonces no me lo cuente como pecado.
- Haré la vista gorda… Tengo que dar la homilía hijo, podemos terminar.
- ¿Qué cosa?
- Que tengo que dar misa de 7.
- ¡Ah! Vaya Padre, vaya, vaya, vaya, ya terminé.
- Rece unos padrenuestros, estáis perdonado en el nombre del padre, del hijo y del espíritu santo, amén.
- Alabado sea el señor.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario